lunes, 18 de julio de 2011

HOMENAJE A ERNESTO GOLDAR












QUERIDOS AMIGOS






Con profunda tristeza recibo la noticia del fallecimiento de Ernesto Goldar,ensayista, poeta, docente universitario, gran amigo al que tuve el privilegio de conocer hace ya más de treinta años. Nos conocimos en SADE, en ocasión de un curso de Ensayo, que él dictaba por entonces.
¿Qué decir frente al enorme vacío que nos deja su partida?
Recordaremos siempre su figura carismática, la obra prolífica, testimonio de un pensamiento brillante, sin concesiones, y de su gran pasión por la literatura y la política. Lo cierto es que la palabra suele ser inhábil para expresar el dolor frente a pérdida tan irreparable.

Es por ello, querido Ernesto, que dedico este espacio, como un modesto tributo a tu obra poética.



RAIGAMBRE NOCTURNA




Habita mi ciudad porque la ve

con ojos ciudadanos;

existe en mi ciudad

porque tiene sentimientos

de ola fugitiva,
de ligereza en la existencia,
un ocurrir, el equilibrio amenazado siempre.
Descubre mi ciudad y su decoración de nervios

excitables,

de ritmos y estilos versátiles,

las impresiones súbitas y agudas y efímeras.

Compite en mi ciudad de sensoriales experiencias,

de paisajes,

de predominio del momento,

las cosas disueltas y firmemente trabadas

en una metamorfosis.





ALGUIEN PIDE SILENCIO



Llegó a la cumbre alta de las populares reverencias,

al bronce, al mito, la pinta y la sonrisa,

un nacimiento que da para polémica

y una vieja que acompañó a la Chacarita.

Se le dieron todas, pero Cadícamo y Cobián

baten la justa: la vida perdurable

son los aplausos tauras

que escuchó en un boliche

cuando cantaba

su primer canción.




ESCUCHAR ACONTECE


El poeta no es en nada un escribiente,
quiero decir,

no usa las palabras que hablan y se escriben,

y las palabras gastan.

Nombra el poeta, y el sentimiento escucha

que dentro de sí mismo se devela,

no es dueño de palabras,

y menos las dispone para poner la voluntad.

El poeta origina, vuelvo a decir,

obedece,

a la palabra oye,

la dice con la boca cerrada

y le devuelve la retenida dulzura de su corazón.


POEMAS DE ERNESTO GOLDAR
DEDICADOS A ELISA DEJISTANI

VIMOS DE NUEVO

Ella murmura algo,
ella murmura un oh o un no,
como si nadie lo hubiera dicho,
como si viniera de ninguna parte,
como si no estuviese allí,
como si de mirar tan fijo
sus ojos se hubiesen quedado
impresos en los míos,
como ocurre con el sol
cuando uno cierra los ojos
y el sol ya no está.







LA ENDECHA



Esa mañana era un día gris,

aunque no un año gris.

Esa mañana, en realidad,

el mismo tiempo

no había sido gris desde aquel amanecer,

seis años atrás,

como si el gris entonase una elegía

por aquella a quien se debe

(y se debe siempre)

el derecho y el privilegio

de extrañarla, sin otra preocupación




SÍNTESIS BIOGRÁFICA
ERNESTO GOLDAR,






Nacido en Buenos Aires y arquetípico transeúnte de esa ciudad,periodista y docente universitario.
Reconocido ensayista, se le deben más de veinte libros dedicados a puntos dehistoria política, de sociología y de conexiones literarias de esos temas. Por mucho tiempo apenas si se difundió su obra poética, de la que dan cuenta hasta el presente sólo tres títulos: Feria de San Telmo, de 1977, Instinto de conversación, aparecido tres años más tarde y En voz desmayada y baja, de 2008. Sin embargo, en los años últimos el reconocimiento a su condición de poeta se ha ido afianzando y hoy se lo considera uno de los más representativos de la poesía argentina actual, dentro de una línea de ternura descriptiva y reflexiva, estrechamente adherida a perspectivas existencialistas, y que procura volcar lucidez sobre sus desencantos, limitaciones, pérdidas e incoercible ansia de pervivencia.